La Atlántida en Doñana
Publicado el 16/03/2011
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Ángel Román
Las últimas noticias emitidas por un gigante como National Geographic —de las cuales se han hecho eco prácticamente todos los medios de comunicación españoles— acerca de la posible ubicación de la mítica Atlántida en las costas de Cádiz, corroboran lo que ya mucha gente defendía con sus hipótesis desde mediados de los años ‘40.
Siguiendo esa línea de investigación, en 2009 conseguí publicar un ensayo titulado La Música en Tartessos y en los pueblos prerromanos de Iberia (ed. Lulu Enterprises) en cuyo Capítulo I (pp. 25 y sigs.) aparece mi pequeña aportación a la causa, la cual reproduzco, resumidamente, a continuación:
EL MITO DE LA ATLÁNTIDA (extracto).
[…] En cuanto a la Atlántida, Platón recogerá el mito en sus obras Timeo y Critias a mediados del siglo IV a. C., si bien, como él mismo cuenta, se trata de una leyenda egipcia que llegó a oídos del sabio y estadista Solón entre los siglos VI-V a. C. aproximadamente (cf. Timeo, 20e-25d).
No pocos historiadores han relacionado a la Atlántida con la mismísima Tartessos. A mediados del siglo XX Adolf Schulten encarnó a uno de los más acérrimos defensores de este posible paralelismo, y todavía hoy, mientras se escriben estas páginas, un grupo de científicos alemanes de la Universidad de Wuppertal se encuentra investigando en la marisma de los Hinojos (entre Cádiz, Huelva y Sevilla) unas extrañas estructuras circulares submarinas que podrían revelar algunas noticias verdaderamente fascinantes en lo que respecta a ambas ciudades. Reflejando las palabras del científico alemán R. Kühne (2004), la ciudad y sociedad de los atlantes podrían ser identificadas con la Tartessos de la Edad del Hierro o alguna otra cultura del sur de España perteneciente a la Edad de Bronce, lo cual llevaría al investigador alemán a sacar en conclusión que la Atlántida podría equipararse de modo probable con Tartessos. Un autor español, González de Canales (2004), también defiende la muy probable hipótesis de que la ciudad de Tartessos se hallase en parte de lo que hoy es Huelva.
[...]
La conclusión generalizada acerca de la Atlántida puede resumirse en que Platón, en efecto, se inspiró en Tartessos —al igual que lo haría Homero en la Odisea— para posicionar la tierra mítica que le serviría de escenario a la hora de escribir su obra (en este sentido, por ejemplo, González de Canales, 2004); si bien matizaría algunos detalles adecuándolos a su propio fin, ya que, según la opinión de los expertos, el mito de la Atlántida es una metáfora del ideólogo ateniense para intentar exponer hasta qué punto puede la sociedad humana destruirse a sí misma, si no se llevan a cabo ciertos comportamientos políticos y sociales que son, precisamente, los que Platón defendía.
Por mi parte pienso que de algún modo Platón pudo tener un buen conocimiento de Tartessos y de Iberia, y no sólo desde la perspectiva mítico-legendaria o pseudo histórica, sino desde un prisma actual, contemporáneo a él, físico y tangible —téngase en cuenta que en el Timeo (24e) Platón menciona a las Columnas de Hércules, junto a las cuales se encuentra la Atlántida; también hace referencia a la Península en el Gorgias (484b)—. Puede que el filósofo llegase incluso a tener contactos con mercenarios iberos durante alguna de sus tres estancias en Siracusa a lo largo del siglo IV, quizá en el 361 a. C., cuando el tirano Dionisio “El Joven” le obligó a convivir con los soldados de su guardia personal, a la que pertenecía un buen número de aquéllos como en su momento sugirió José Mª. Blázquez (1980). Curiosamente, es esta misma fecha, 361 a.C., la que algunos estudiosos de indiscutible prestigio, como ocurre con A. E. Taylor, atribuyeron a la composición del Timeo, basando el argumento en el análisis estilométrico de la obra.
En consecuencia con todo lo dicho, es indudable que la Península fue conocida desde tiempos inmemoriales, y hasta se puede decir que en la época de las grandes civilizaciones mediterráneas era ya “famosa”. Asimismo, al igual que ocurre con las leyendas micénicas, con las crónicas bíblicas e incluso con ciertos relatos que nos dejó en herencia el mismísimo Platón, esta circunstancia podría licenciarnos a establecer relaciones entre la Península Ibérica con los poemas épicos de Homero, pertenecientes al siglo VIII a. C.
Ángel Román Ramírez
Musicólogo y Profesor de Historia y Ciencias de la Música
Sanlúcar de Barrameda y la Atlántida en Coto Doñana
Algunos empezamos a plantearnos que impacto Socio-económico puede provocar en Sanlúcar de Barrameda, a medio y largo plazo, una posible confirmación de que tenemos la ubicación de la Mítica Atlántida a las puertas de la Ciudad. Si se gestiona convenientemente, puede repercutir en el bienestar de todos los Ciudadanos y el auge de la Ciudad con un Medio Ambiente Sostenible y Trabajo para todos, si se se gestiona mal, puede ser una invasión incontrolada de turismo de baja estopa que arruinaran esta bonita y muy mejorable Ciudad.